La importancia del contenido en el marketing esotérico.

No nos cansamos de señalar una verdad que cada día se hace más evidente. En el marketing digital, el contenido es el rey. Se trata de un concepto asociado a la entrega de valor en nuestras campañas. El mismo, es un mecanismo para enganchar a nuestra audiencia y convencerlas de dos cosas: somos conocedores del área y tenemos las respuestas que requieren. Ese es un valor intangible pero muy real, que las personas esperan con ansias cuando entran a una red especializada. En el marketing esotérico, esto tiene connotaciones agregadas que le ofrecen mayores y mejores posibilidades.

El contenido como concepto asociado al marketing digital.

Como señalamos anteriormente, el contenido es una parte de suma importancia en nuestras campañas. Las razones son muchas entre otras:

• Estimula la búsqueda en Internet. Básicamente cuando entramos a Internet, lo hacemos en la expectativa de encontrar una información. Un dato que nos resulta relevante. El contenido lo posee, es decir, cuando preparamos un artículo para un blog, estamos ofreciendo esa información que el usuario busca.
• Facilita la comunicación con los usuarios. El contenido, sobre todo el que colocamos en elementos como blogs, estimulan la respuesta. Las opiniones son mucho más que interacciones, son puertas abiertas a la persona que opina. Y esto solo es posible sí el contenido es interesante y le aporta valor.
• Ofrece solucion a un problema determinado. En efecto, es otra de las expectativas por las que entramos a leer un contenido. Deseamos una solucion y la encontramos. En el caso del marketing esotérico, es lógico pensar que el usuario busca un dato que le resulte útil para una situación determinada. Al ofrecérselo, determinamos nuestra capacidad para solventar su problema.
• Nos diferencia de la competencia. El contenido es una herramienta poderosa porque nos permite mejorar nuestra marca. Se trata de un valor que no podemos ver, pero que hace diferencia, sobre todo cuando lo optimizamos.

Características de un buen contenido digital.

En términos prácticos, siempre es importante contar con una guía que te indique las condiciones ideales de un contenido. Veamos:

Originalidad.

Es básico, se trata de una condición esencial, porque nos diferencia de otros. Además, el interés del lector se centra en una información novedosa o presentada con un enfoque distinto al común.

Concreción.

El usuario espera una respuesta lo más concreta posible a su necesidad de información. Por ello, el contenido debe caracterizarse en ese sentido. Mientras más cercano al tema y menos divagación, será más adecuado.

Lenguaje sencillo y directo.

No todos los lectores son personas especializadas en el tema que manejas. En el marketing esotérico sobre todo, encontrarás personas comunes que desean una respuesta adecuada a su manejo del tema.

La extensión.

Es otro tema que debes considerar de manera específica. No solo la cantidad de palabras de un contenido, sino incluso, aspectos como la dimensión de las frases. Internet es el mundo de lo rápido. Nadie se detiene mucho tiempo en una lectura. Desean oraciones cortas y con ideas concretas en cada una. El interés del lector, será proporcional a lo que le ofreces en cada segmento. Así que no te extiendas y concreta valor en cada frase.

Lo interesante por sobre lo estético.

Otro fundamento, se refiere a ofrecer datos que interesen al usuario, cosas con las que sienta afinidad. En este caso, lo estético, no debe superar a lo útil nunca. Digamos que lo que le interesa no es el empaque, que es complementario, sino el dato que registra.

Las ventajas del contenido digitalizado.

En una era totalmente digitalizada, el conocimiento no se transmite de una forma tradicional. Por el contrario, se hace a través de los miles de dispositivos a los que tenemos acceso. Por eso, es más sencillo entregar ese valor que identifica al contenido, de manera directa.

Asimismo, el contenido digital, supera con creces el alcance de cualquier otro medio. Es automático, persistente, con posibilidades de transformarlo y adaptarlo en tiempo real.

Mira esta comparación. Tienes un contenido súper interesante, que decides ofrecer a través de una campaña radial. Grabas el mensaje, lo publicas y esperas resultados. Pero…, la realidad cambia sustancialmente de un momento a otro. Debes retirar el anuncio, grabar de nuevo, suspender el contrato, en fin, miles de cosas asociadas.

Por el contrario, en el caso de un contenido digital. Redactas, publicas, verificas, todo en un mismo proceso. Se produce la eventualidad que hace obsoleto tu contenido, pues, simplemente lo retiras, modificas y en cuestión de minutos, te actualizas y explicas a tu audiencia las razones del cambio en el mensaje.

Como ves, los contenidos digitales, no solo son interesantes como medios informativos. Son esenciales para llegar a tu público objetivo. Son el pilar fundamental de todo intento de comunicación y representan una manera de asegurar tu marca.

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